Una vecina de la comarca de Avilés de unos 50 años falleció ayer por la tarde al despeñarse cuando hacía una ruta de montaña por la cara oeste del pico Carraspión, en Oceño, en el concejo de Peñamellera Alta. La mujer se encontraba con su marido y otras personas, todos miembros del grupo de montaña de Ensidesa, cuando cayó por un terraplén de unos doscientos metros, recibiendo un impacto que le costó la vida.
El suceso se produjo poco antes de las 18.00 horas y sus acompañantes llamaron al Centro de Coordinación de Emergencias indicando que una mujer se había caído por un terraplén y no la veían. El 112 Asturias movilizó al Grupo de Rescate del Servicio de Emergencias del Principado (SEPA), que se desplazó a bordo del helicóptero medicalizado, que en esos momentos se encontraba en una intervención en Cangas de Onís.
Una vez llegados hasta el lugar del siniestro, el médico rescatador accedió hasta la mujer y sólo pudo verificar que había fallecido. Los efectivos de rescate obtuvieron la pertinente autorización y procedieron a evacuar el cuerpo sin vida de la fallecida. Tuvieron que utilizar veinticinco metros de cable con la grúa para elevar al rescatador y la camilla con la mujer accidentada hasta la aeronave. Su marido fue trasladado al Hospital Comarcal del Oriente, el Grande Covián, en la localidad de Arriondas.
El grupo de montaña de Ensidesa cuenta en la actualidad con unos novecientos o mil socios que realizan, además de la colectiva, diferentes salidas de montaña, y ayer precisamente otros socios pasaron el día por la zona de Peña Ubiña. Pese a que no se conocen los detalles del suceso, la que realizaba el grupo en Oceño "no es una actividad de dificultad", como expuso Manuel Taibo, responsable de seguridad de la Federación Asturiana de Montaña y también miembro de la agrupación avilesina. Taibo destacó lo que las estadísticas reflejan, que "la mayor parte de los accidentes se produce en zonas que en principio no ofrecen alta dificultad, en actividades de senderismo y montaña convencionales, asequibles en principio". La del pico Carraspión no fue la única salida para los efectivos del SEPA en la comarca del Oriente ayer, ya que a Peñamellera Alta llegaron procedentes de Cangas de Onís, donde un varón de 60 años tuvo que ser evacuado al Hospital de Arriondas también a bordo del helicóptero medicalizado tras ser picado por una culebra en ambas manos. Este suceso se produjo poco antes de las 17.22 horas, cuando el 112 recibió una llamada de aviso.
El interlocutor indicó que una culebra había picado a un hombre, miembro de un grupo de montaña que estaba haciendo una ruta entre Tornín y los Porros de Vizcalluenga, en Cangas de Onís. En su ayuda acudió el equipo de rescate del SEPA y una vez en el lugar del suceso el médico rescatador atendió al afectado, que presentaba picaduras en ambas manos. El herido fue trasladado al Hospital de Arriondas sin que, en principio, se tema por su estado de salud.
